Este domingo, los aficionados colombianos y argentinos asistieron al estadio de Miami con la firme convicción de que su equipo ganará la final de la Copa América 2024. Sin embargo, la celebración se vio empañada por el intento de decenas de hinchas de ingresar sin entrada.
Desde horas antes del inicio del partido, miles de colombianos y argentinos llenaron los alrededores del estadio. Ni la temperatura de 32 °C ni el caos para llegar al lugar los detuvo, la espera se hizo rápida con los asados en los aparcamientos, el consumo de alcohol y charlas, mientras veían la final de la Eurocopa que España ganó a Inglaterra, según informó la AFP.
Entre los numerosos aficionados con banderas, sombreros y pancartas, se formó una revuelta en una de las entradas del estadio. Un grupo de simpatizantes logró pasar los puestos de seguridad sin entradas, pero la Policía los alcanzó y detuvo. Uno de ellos resultó con la cara ensangrentada después de ser derribado por un guardia.
Un oficial de policía presente en los incidentes declaró a la AFP que varias personas lograron ingresar, aunque no está claro si tenían entradas para el partido. La situación generó un momento de tensión en medio de la algarabía previa al enfrentamiento final.